viernes, 10 de enero de 2014

EL PARTIDO DE SU VIDA. LA MEJOR SELECCIÓN DE FÚTBOL DE COREA DEL NORTE

 
Los héroes de aquella histórica hazaña que aún seguían con vida en 2002.
 
Son muchas las mentiras que a lo largo de mi vida y mi militancia he tenido que escuchar sobre el comunismo, entre las más rocambolescas se encuentra la historia de que Corea del Norte había accedido a los cuartos de final del Mundial de Fútbol del 66, porque en el descanso, aprovechando el gran parecido entre los asiáticos, cambiaban a todos o casi todos los jugadores por jugadores de refresco... cosa que no es cierta. De aquélla había cámaras de televisión y el engaño, todavía hoy se podría constatar, cosa que no se ha hecho hasta la fecha porque obviamente es una patraña más .
 

 
Si deseas ver el documental sólo tenéis que descargarlo del torrent, está en inglés pero merece la pena, a pesar de ser un reportaje británico.
 
 
 
Ahora os voy a contar la historia  de verdad, todo comienza: un 21 de noviembre de 1965 en la capital de Camboya, Phnom Penh, la selección de fútbol australiana se jugaba un puesto para el mundial de Inglaterra 66 con la selección norcoreana, los otros dos equipos que componían el grupo se habían caído, Sudáfrica por sanciones del apartheid y Corea del Sur por solidaridad con los 15 equipos africanos que se negaron a que Asia, África y Oceanía sólo tuviesen una plaza para el Mundial.
 
 
Aquel 21 de noviembre la selección norcoreana brilló como nunca, ganando por 6:1 a la selección australiana, asegurando de esta forma su puesto para el Mundial, tres días más tarde en el partido de vuelta la República Democrática Popular volvería a sorprender al mundo goleando a Australia 1:3.
 
No teniendo que compartir la plaza para el Mundial con los equipos africanos el trabajo estaba hecho.
 
Las inexistentes relaciones diplomáticas entre Pyongyang y Londres estuvieron a punto de impedir que los jugadores disputasen el Mundial.  
 
Italia, Chile y la Unión Soviética  fueron los integrantes del Grupo en el que se encuadraba la pequeña Corea. Su sede sería la ciudad obrera de Middlesbrough donde disputarían sus partidos como equipo local en el estadio Ayresome Park.
 
A pesar de la derrota inicial 3:0 frente a la todopoderosa Unión Soviética, no tardarían mucho en ganarse las simpatía del público, en especial de los más jóvenes, tras empatar 1:1 con Chile y sobre todo tras derrotar 1:0 a Italia, una de las selecciones punteras.
 
 
Niños y mayores de la obrera ciudad de Middlesbrough apoyando a la selección norcoreana en los campos de fútbol y en las calles.
 
 
Su llegada a Liverpool también despertó bastante revuelo entre los británicos, sobre todo porque habían conseguido que un nutrido grupo de habitantes de Middlesbrough les acompañaran a los cuartos de final ante Portugal.
 
Curiosamente un africano, el mozambiqueño Eusebio, luciendo orgulloso la camiseta de su opresor, Portugal, fue el verdugo de la selección norcoreana.
 
 
La primera parte de la fase de cuartos ante Portugal fue apoteósica, en el minuto 25 los norcoreanos ganaban 3:0 y el público se encontraba volcado con ellos, sin embargo el sueño se desvanecería gracias a todo un superclase recientemente fallecido, Eusebio, quién anotaría 4 tantos para su selección, 2 en la primera parte y otros 2 en la segunda, consiguiendo dar la vuelta al marcador y desvaneciendo las esperanzas de unos jugadores que jamás habían podido imaginar llegar tan lejos. El resultado final fue 5 a 3.